Un estudio de investigadores de la Universitat Politècnica de València (UPV) y de la Universidad de Georgia ha desvelado que la domesticación del tomate involucró culturas agrícolas que abarcan desde Perú a México. De este modo, los especialistas arrojan luz sobre “nuevos secretos de la compleja historia americana” de este alimento. Las plantas que comemos hoy en día han sido domesticadas. Del mismo modo que en la naturaleza no hay chihuahuas, tampoco hay tomates grandes y jugosos, trigo harinero o maíz para palomitas. Nuestros antepasados modificaron esas especies para adaptarlas a sus necesi…
